La dislexia es un trastorno específico de la lectura y/o la escritura y la ortografía: disortografía. Estos trastornos comienzan en la etapa alfabética del aprendizaje de la lectura.
¿Cómo se manifiestan estos trastornos?
Acerca de leyendolos trastornos se manifiestan por una dificultad para identificar palabras, leerlas con fluidez y sin errores. Se manifiestan como un lectura extremadamente lenta y por un dificultad para dividir palabras en una oración. Por lo tanto, se manifiestan por una dificultad para comprender textos.
En cuanto a yoescribiendolos trastornos se manifiestan por una gran fatiga relacionada con la lectura y la escritura. Por uno escritura lenta, compleja y, a veces, ilegible (disgrafía), así como por muchas faltas de ortografía algunos de los cuales son fonéticos.
¿Cuáles son las consecuencias de estos trastornos?
Debido a estos trastornos, los niños pierden interés en leer y escribir. Ellos les resulta mucho más difícil acceder a la información por su dificultad para leer y escribir. Sus cuadernos son a menudo ilegibles.lo que no facilita en absoluto el estudio de las lecciones y los deberes a realizar… Lo cual automáticamente causa dificultad de aprendizaje en muchas materias. Sus resultados académicos no están a la altura de los esfuerzos que han realizado.
Cuando son mayores, los exámenes escolares pueden ser complicados. Además, su educación puede ser más difícil debido a la riesgo de repeticióndel’derivación a una formación menos complejapero menos ambicioso que sus capacidades intelectuales, o elcese completo de su educación.
Todo esto conduce a una caída de la autoestima y fragilidad psicológica..
Dislexia y Montessori
La pedagogía Montessori es adecuada para niños que tienen, o no, dificultades en el aprendizaje de logros académicos, y también para niños con trastornos disléxicos y disortográficos.
La pedagogía Montessori tiene muchas ventajas : en primer lugar, ella va restaurar la confianza del niño respetando su propio ritmo de trabajo. El material educativo fue creado para aislar las dificultades. En consecuencia, el educador que atiende a un niño disléxico o disortográfico, permite tiempo para poder ir integrando el aprendizaje poco a poco mediante el uso de los sentidos.
Ejemplo: Letras ásperas.
En una escuela Montessori, el niño no se sentirá juzgado y podrá, en un ambiente tranquilo y solidario, trabajar con delicadeza, experimentar, crecer y aprender serenamente.