Las Fiestas de fin de año son una ocasión emocionante para la mayoría de los niños, pero para aquellos con trastornos del espectro autista (TEA), puede ser una situación desalentadora. Los cambios en el entorno, la presencia de extraños y los ruidos pueden ser especialmente difíciles de manejar para los niños con autismo. Como padres, podemos hacer que las celebraciones sean menos estresantes para nuestros hijos con TEA a través de la crianza respetuosa. Esto implica crear un entorno seguro y familiar en el que los niños se sientan cómodos, respetar sus limitaciones, necesidades individuales y hablar con ellos acerca de la celebración con antelación.
Es importante intentar que los niños con TEA comprendan que la Navidad es una fiesta de alegría y que hay que disfrutarla. Para ello, hay que tener en cuenta algunas consideraciones. Primero, hay que explicarles con detalle el evento, sus rituales y sus significados. Esto ayudará a los niños con autismo a comprender qué esperar de la celebración. Esto también ayudará a los niños a anticipar cambios en el entorno y cualquier cambio de rutina que venga con la celebración.
Es importante preparar a los niños con TEA para las situaciones sociales que van a enfrentar. Esto puede significar practicar conversaciones con aquellos con los que van a compartir la fiesta, como familiares y amigos. Esto puede ayudar a los niños a prepararse para la situación y a sentirse más seguros. Además, los padres también deben explicar a los invitados cómo actuar y cómo hablar con un niño con TEA para ayudar a reducir el estrés.
Otra consideración importante es que los niños con TEA pueden tener un umbral de sensibilidad diferente a los ruidos, la luz y los olores. Por lo tanto, es importante tener en cuenta estos factores al elegir el lugar para la celebración. Si se elige un lugar al aire libre, es importante encontrar una ubicación que esté lo suficientemente alejada de bulliciosos parques, tiendas y actividades similares. Esto ayudará a los niños a sentirse más cómodos y seguros.
Es importante tener en cuenta también los límites que los niños con TEA pueden tener. Los padres deben respetar estas limitaciones y estar preparados para ofrecer a los niños un descanso cuando lo necesiten. Esto puede significar ofrecerles un lugar tranquilo para relajarse o una actividad planeada para que puedan tomar un descanso cuando sientan que la situación se les vuelve demasiado estresante.
Las Fiestas de fin de año pueden ser una experiencia estresante para los niños con TEA. Sin embargo, los padres pueden ayudar a los niños a disfrutar de la celebración a través de la crianza respetuosa. Al hablar con los niños con TEA acerca de la fiesta con antelación, prepararlos para la situación, ayudarlos a identificar las señales de estrés y estar listos para ofrecerles un descanso cuando lo necesiten, los padres pueden ayudar a sus hijos a disfrutar de la experiencia de celebrar el fin de año.