Cada vez son más los padres que intentan crear un ambiente en sus hogares basado en los principios básicos de la filosofía Montessori, que fomenta la autonomía del niño, respetando sus ritmos y motivando el conocimiento basado en la manipulación.
Una de las estancias de la casa donde los niños pasan más tiempo jugando y aprendiendo es el dormitorio. Por lo tanto, en el momento de diseñar un dormitorio infantil al estilo Montessori Es importante tener en cuenta una serie de sugerencias que favorecen la independencia, el desarrollo y la participación del niño en la vida práctica.
Las tres características del dormitorio Montessori
Si has decidido organizar el dormitorio de tu pequeño según la pedagogía Montessori, estos son los Tres características a tener en cuenta al diseñar:
Sencillez. La filosofía Montessori apuesta por espacios decorados minimalistas y sencillos que fomenten la libertad de movimiento del niño sin muebles ni complementos que dificulten su paso.
Orden y espacios definidos. El orden es fundamental en la pedagogía Montessori. Los espacios organizados generan un efecto positivo y relajante y favorecen el aprendizaje. Por eso, si además de dormir, el niño va a utilizar el dormitorio como sala de juegos y/o espacio de trabajo, es importante que los rincones estén bien delimitados y no acumulen exceso de juegos o libros.
Autonomía. El niño debe ser capaz de actuar en su dormitorio de forma totalmente autónoma e independiente. Por ejemplo, debe ser capaz de subirse y bajarse de la cama sin ayuda, sacar la ropa del armario y guardarla, organizar juguetes y libros… Para ello, todos los muebles y perchas deben estar a su disposición. . altura.
Cinco elementos básicos de un dormitorio Montessori
1. Habitación Montessori
El niño debe dormir en un cama que te permite subir y bajar de forma independiente y segura, así como observar desde ella toda la estancia sin que ningún obstáculo se lo impida. Podemos optar por una cuna Montessori, aunque también bastaría con un colchón colocado en el suelo.
2. Armario para la ropa
Al vestirse, es importante que el niño Podrás tener toda tu ropa de forma organizada y visual. Podemos organizar el armario como más nos guste (utilizando cestas, cajas, perchas, cajones…), pero el objetivo siempre debe ser fomentar la independencia del niño para que solo pueda elegir su ropa, recogerla de solo y también ponerla lejos.
Otra buena idea es colocar dos o tres perchas a la altura del niño para tener siempre a mano la ropa y complementos más utilizados en el día a día (abrigo, gorro, mochila, bata…).
3. Muebles que ayudan a mantener el orden
Además del armario para la ropa, es fundamental que el dormitorio tenga otro tipo de muebles o estanterías que ayudan a mantener el orden, especialmente si el dormitorio también se utiliza como sala de juegos.
Es recomendable optar por muebles sencillos, accesibles al niño y con grandes espacios abiertos de almacenamientopara tener todas las cosas a la vista sin necesidad de apilarlas o apilarlas.
También son muy populares las cajas, cajones o cestas para guardar objetos voluminosos o juguetes del mismo tipo (por ejemplo coches de juguete, figuras de madera, animales, peluches, construcciones…). Podemos utilizar vinilos o etiquetas para identificar el contenido de cada caja, mientras ayudamos al niño a interiorizar el concepto de clasificación.
4. Espejo de pared colocado a tu altura
Jugar frente al espejo es muy beneficioso para el desarrollo del niño, ya que estimula su curiosidad, lo ayuda a comprender su individualidad y a tener una mejor comprensión de sí mismo y de sus patrones corporales. Además, el espejo ayuda a aumentar la sensación de amplitud y luminosidad en la habitación, y también permite que el niño tenga una visión global del entorno en el que se mueve.
Como, el espejo es un elemento imprescindible en la decoración de una habitación Montessori. Tiene que ser irrompible, y mientras el niño sea pequeño lo colocaremos en horizontal a ras de suelo para que se le vea jugando.
5. Espacio de trabajo
Si además de descansar queremos que el dormitorio tenga un espacio de juego, no podemos olvidarnos de crear un rincón agradable, cómodo y práctico donde el niño puede concentrarse y dale vida a tu creatividad. En este sentido, los escritorios o conjuntos de mesa y taburete para pintar o realizar actividades son otro elemento imprescindible.
Como el resto de los muebles, la mesa debe ser adecuada al tamaño del niño y debe poder usarla tanto de pie como sentado. Una buena idea es utilizar mesas con tapas que oculten bandejas de almacenaje debajo, que te permitan guardar materiales o utilizarlos para otro tipo de actividades sensoriales.
6. Más consejos decorativos
- Tanto para el mobiliario como para el resto de elementos decorativos optaremos por materiales naturales como madera, rafia, ratán, mimbre o tejidos de varios tipos. Este tipo de materiales no solo aportan estética, calidez y belleza sino que también conectan al niño con la naturaleza y estimulan sus sentidos.
- Es recomendado pintar las paredes en colores claros o neutrosal invitar a la relajación, son más luminosas y proporcionan una agradable sensación visual.
- Podemos decorar la pared con guirnaldas de luces, banderines, vinilos decorativos, estampados de animales, fotografías…
- Es recomendado coloque una alfombra grande y esponjosa confeccionado con tejidos naturales para que el niño pueda jugar en el suelo, leer o tumbarse si lo desea sin resfriarse.
Dormitorio Montessori: ¿cuándo puede empezar a usarlo el niño?
No hay una edad especifica donde los niños deben tener su propio dormitorio (individual o compartido con hermanos), ya que cada familia tiene necesidades diferentes. Así, algunos padres optan por el colecho durante los primeros meses o incluso años de vida, mientras que otros se plantean trasladar al niño a su propia habitación a partir de un momento determinado.
Sea como fuere, cuando diseñar un dormitorio infantil al estilo Montessori es recomendable no apresurarse a invertir grandes sumas de dinero en muebles y decoración (podemos encontrar cosas a muy buen precio o incluso adaptar lo que tenemos en casa), y observar cómo se desarrolla nuestro hijo para detectar lo que puede necesitar según el su etapa de desarrollo.
Recuerda que lo más importante es que el dormitorio es un espacio práctico, funcional y acogedor, que invita al niño a utilizarlo de forma independiente.